Golden-hour panoramic scene of an open meadow merging into a sandy beach, a seasoned detectorist in casual outdoor gear sweeping a modern multifrequency metal detector across the foreground; semi-transparent depth overlay lines descend into the soil showing 10 cm, 30 cm and 1 m marks with subtle glowing labels “Coins”, “Relics”, “Large targets”; distant sunrise casts warm rim-light on dew-tipped grass and gentle waves, cinematic 16:9 composition, shot on a full-frame DSLR with ultra-real detail and rich dynamic range.

¿Mito o realidad? Profundidad real de los detectores de metales y los modelos que SÍ llegan más hondo

1 · ¿Qué entendemos por “profundidad real” en detección de metales?

Cuando alguien pregunta «¿cuántos metros alcanza un detector?» la respuesta corta suele ser «depende». Depende del tamaño del objetivo, de la mineralización del suelo, de la tecnología que emplea la máquina y —no menos importante— de las expectativas que uno traiga en la mochila. 20-40 cm para monedas y joyas con VLF de gama media, y hasta el metro (algo más con bobinas gigantes) con equipos PI, pero nunca los 5 m que se anuncian en ciertas redes sociales.

Durante años he seguido en foros a detectoristas que confirman ese margen. “Mi Equinox 900 sacó un denario a 28 cm en arena húmeda y sonó clarito”, comparte @Juanelo78 en el grupo Detectoristas España. De ahí la idea de “profundidad real”: distancia a la que una señal sigue siendo identificable con ajustes normales, sin forzar sensibilidad al máximo.


2 · Los 5 factores físicos que limitan la penetración del campo electromagnético

  1. Tamaño de la bobina: una de 13–15″ crea un campo más ancho y llega más hondo que una de 9″, aunque pierde sensibilidad a objetos diminutos.
  2. Frecuencia: las bandas bajas (≤ 5 kHz) penetran mejor; las altas (≥ 20 kHz) afinan objetos minúsculos cerca de superficie.
  3. Potencia / forma de onda: en VLF la potencia es fija; en PI podemos ensanchar el pulso y ganar unos centímetros… si el terreno lo permite.
  4. Conductividad y orientación del objetivo: un plato de cobre responde antes que un alfiler de hierro, y cambiar la inclinación puede volverlo casi invisible.
  5. Mineralización y humedad: la arcilla roja rica en hierro o la arena marina salada atenúan la señal y fabrican falsos positivos.

“En playa seca consigo 33 cm con el Deus II, pero en arena húmeda se queda en 24 cm” — @MartaBeachHunter.


3 · Influencia del tamaño y la composición del objeto

Un anillo de oro de 18 mm responde casi como una moneda de plata del mismo tamaño, pero un pendiente fino puede pasar desapercibido a media distancia. La relación masa–superficie dicta cuánta corriente parásita genera el metal ante el campo transmisor y, por tanto, cuánto “eco” recibirá la placa receptora.

Prueba colectiva (bosque arcilloso, organizada por @FerruDetector): un denario romano (18 mm Ø) suena limpio a 27 cm en VLF 11 kHz y a 38 cm en PI, mientras que una barra férrica de 15 cm da respuesta clara a 65 cm (VLF) y 110 cm (PI), al precio de saturar la discriminación en modo monedas.

No es que el hierro “penetre” mejor, sino que la masa enorme crea un campo secundario más intenso. Por eso muchos usuarios alternan modo todo-metal para buscar y discriminan sólo al cavar.


4 · Tecnologías VLF vs PI: ventajas, límites y los mitos de los “10 m”

Los detectores VLF transmiten y reciben en continua: discriminan bien la chatarra y consumen poca batería. Los PI emiten pulsos de alta energía, ignoran casi toda la mineralización y ganan profundidad en blancos grandes… a costa de peso, precio y escasa identificación de metales.

“Con mi GPZ 7000 recuperé una herradura a 1,05 m bajo arcilla húmeda” — @GoldRick (foro TreasureNet).

Ensayos de laboratorio confirman que un plato DD de 11″ a 5 kHz detecta una moneda de níquel a 41 cm, cifra que cae a 35 cm a 15 kHz; la física es tozuda. Ningún detector comercial certificado supera varios metros con pequeños objetivos, así que desconfía de la publicidad milagrosa.

4.1 · Mejores detectores VLF en Amazon (profundidad media segura)

MINELAB MANTICORE - Detector de metales impermeable Multi-IQ+ de alta potencia para adultos con identificación de objetivo avanzada (bobina doble D de 11 pulgadas incluida)

MINELAB MANTICORE – Detector de metales impermeable Multi-IQ+ de alta potencia para adultos con identificación de objetivo avanzada (bobina doble D de 11 pulgadas incluida)

1299.99$

Detector de metales AT Pro

Detector de metales AT Pro

1299.99$

Fisher F75 - Detector de metales multiusos
Visita la tienda de Fisher Labs

Fisher F75 – Detector de metales multiusos

419.99$


5 · Frecuencia, potencia y bobinas: cómo exprimir cada centímetro

Close-up, high-detail shot of three metal-detector coils laid on fresh green grass beside a depth ruler: a small 9-inch high-frequency round coil, a 13-inch double-D coil, and a large 15-inch concentric coil; soft side lighting highlights textures, caption text “Frequency & Coil Size Matter,” shot on a full-frame camera, hyper-real clarity.

Escoger bien la frecuencia es la palanca más barata para ganar profundidad; las plataformas con Multi-IQ (Minelab), FMF (XP) o Multi-Flex (Garrett) permiten lanzar varias bandas simultáneas y sumar lo mejor de cada una:

  • ≤ 5 kHz penetra arcilla y turba; ideal para reliquias profundas.
  • 10–15 kHz es el punto dulce entre detalle y alcance.
  • 20–40 kHz salva pendientes o joyas mini en superficie.

Si trabajas con VLF, recuerda que la potencia está limitada por normativa; en PI, aumentar la anchura del pulso añade energía pero dispara falsos en suelos salados. Por eso muchos veteranos combinan un plato 15″ DD para peinar hondo y un 9″ concentrador para afinar entre clavos.


6 · Efecto del terreno: mineralización, humedad y salinidad

Meter un detector en playa sin bajar la ganancia convierte el umbral en discoteca. La comparación práctica del vídeo de abajo 👇 muestra cómo la misma bobina pierde 9 cm de alcance al pasar de arena seca a agua salada. En suelos volcánicos el “hierro fino” satura las frecuencias altas; usuarios de Deus II bajan Iron Volume y activan Silencer para seguir oyendo blancos marginales sin fatiga auditiva.

“Con el Simplex Ultra encontré mi primera hebilla del XVI a 30 cm; en playa negra no pasaba de 18 cm” — @Miguel_ToneHunt.


7 · Configuración práctica: sensibilidad, balance y velocidad de recuperación

Una mala configuración puede restar más profundidad que cualquier bobina cara. Pasos clave:

  1. Balance de suelo: auto-balance en un punto limpio, retocar ±3 hasta que el umbral quede “casi” plano.
  2. Recovery Speed: cuanto más baja, más profundo pero más propenso a falsos; lo habitual es 3 en campo abierto y 5-6 en parques con basura.
  3. Audio modulable: un tono muy bajo suele delatar blancos marginales.
  4. Notch e Iron Bias mínimos: cavar un clavo extra duele menos que enterrar una buena moneda.

8 · Comparativa rápida de modelos populares y su rango de profundidad (testimonios incluidos)

ModeloProfundidad moneda Ø 25 mm*Terreno óptimoCita de usuario
Minelab Manticore34 cmMixto“Reales a 31 cm en tierra arada” —@Carlos-Mxn
Garrett AT Pro30 cmRíos, bosques“Botón colonial a 28 cm en barro” —@RiverScout
XP Deus II32 cmPlayas, relics“Anillo 10 k a 29 cm” —@MartaBeachHunter
Minelab GPZ 700070 cm**Oro profundo“Pepita de 5 g a 58 cm” —@GoldRick

* Suelo mineral medio. ** PI ZVT, objeto > 5 g.


9 · Errores comunes y publicidad milagrosa

  • “Mi detector llega a 10 m” — Normalmente se refieren a bloques de chatarra tamaño nevera o a pseudotecnologías sin base científica.
  • Sensibilidad al máximo — Crea ruido y tapa señales débiles.
  • No recalibrar balance — Cada tipo de suelo requiere su propio cero.
  • Confiar solo en la ID numérica — A grandes profundidades la lectura se distorsiona.

10 · Buenas prácticas y legislación antes de excavar profundo

En España, cualquier prospección en yacimientos catalogados o bienes de dominio público precisa permiso autonómico (Ley 16/1985). Excavar más de 50 cm obliga a solicitar autorización extra y, en costas, coordinación con Demarcación de Costas. Todo hallazgo arqueológico debe notificarse en 48 h.


11 · Conclusiones y próximos pasos

  • La profundidad práctica para monedas y reliquias medianas se sitúa entre 25 y 40 cm con VLF modernos; un PI puede duplicar esa cifra en objetivos grandes, pero no multiplicarla por diez.
  • El terreno pesa tanto como la máquina: aprende a leer su mineralización y ajustar balance y velocidad.
  • Invierte antes en platos y técnica que en renovar detector cada temporada.
  • Apóyate en la experiencia colectiva: los vídeos y foros ofrecen pruebas imparciales que evitan decepciones costosas.

Próximo reto: practicar cabeceo lento en todo-metal, anotar profundidad real de cada hallazgo y, con tiempo, crear tu propio patrón de terreno. ¡Nos vemos bajo la próxima señal débil!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *